Ahorrando dinero y cuidando el planeta.

Introducción

Durante años fue casi obligatorio llevar tarjetas de presentación en papel. Pero imprimirlas, reimprimirlas por cambios de datos, y el desperdicio que generan, implican costos ambientales y financieros. Hoy soluciones como Tapo permiten tener un perfil digital (o tarjeta física de PVC) sin necesidad de imprimir papel de forma constante.

 

En este artículo comparamos ambos enfoques para mostrar el ahorro real y el impacto.

 

El problema en Centroamérica

 

En países como Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Panamá, decenas de miles de profesionales y empresas imprimen tarjetas cada mes.

 

  • Una impresión de 500 tarjetas de papel puede costar entre Q200–Q500 (USD 25–65) dependiendo del diseño y calidad.

  • Si una empresa mediana con 50 colaboradores imprime 500 tarjetas cada uno, hablamos de 25,000 tarjetas al año, con un gasto de al menos Q10,000–Q12,000 (USD 1,200–1,500) solo en papel que en su mayoría termina en la basura.

  • El impacto ambiental también es enorme: se estima que el 88% de las tarjetas de papel se descartan en la primera semana.

 

El costo real vs el ahorro

 

Concepto

Tarjeta de papel

Tapo PVC / App digital

Costo inicial

Q200–Q500 por tiraje de 500

Q185 una sola vez

Reimpresiones

Cada vez que cambian datos

No aplica: actualizas en la app

Acceso digital

Hay que teclear datos manualmente

Escaneo por NFC, QR o con IA

Disponibilidad

Se acaban, hay que reimprimir

Nunca se termina

Perfil digital

No disponible

Gratis en la app, sin necesidad de PVC

 

Ejemplo práctico:

Un profesional que imprime 500 tarjetas de papel al año gasta mínimo Q200. En 3 años son Q600 o más, sin contar reimpresiones. Con Tapo, una sola tarjeta de PVC cuesta Q185 y dura indefinidamente. O incluso puedes optar por el perfil digital.

 

 

Beneficios adicionales

 

  • Gratis y sin barreras: cualquiera puede crear un perfil digital en la app, sin comprar un Tapo físico.

  • Networking inteligente: escanea tarjetas de papel con inteligencia artificial y evita digitar datos.

  • Actualización en tiempo real: cambia tu número, cargo o redes sociales sin volver a imprimir nada.

  • Impacto ambiental: cero papel, cero desperdicio.

 

Conclusión

 

En Centroamérica, gastar cada año en tarjetas de papel ya no tiene sentido. Con Tapo, además de ahorrar dinero desde el primer día, proyectas una imagen moderna, sostenible y digital.


Olvídate del papel, haz tus conexiones con Tapo.

Regresar al blog